Las navajas artesanas de Taramundi son la última joya de una larga evolución metalúrgica que desde el siglo XVIII se viene especializando en, piezas de auténtica cuchillería con hojas de hierro pequeñas y estrechas, de apreciado corte, empuñadura de madera de boj o brezo, fabricadas pacientemente gracias a la sabiduría de unas manos muy atinadas que pasan de fase en fase en el trabajo, y que lo rematan a base de dibujos geométricos coloreados, propios de un trabajo artesano que produce navajas a medida, muy apreciadas por su funcionalidad y belleza, y que en último término se asocia a lo escaso. La producción se somete a los encargos, el trabajo en serie no se conoce, sólo cierta planificación cuando los pedidos son numerosos (lo que ocurre casi todo el año).
Esta artesanía sin par prevalece en este lugar del occidente de la región por varios motivos. Los principales son: la abundancia de mineral, el agua, con caída suficiente para dar potencia a las máquinas soplantes, la madera que se necesita para el fuego en las fraguas o ferrerías, y sobre todo una tradición oral que no ha escatimado explicaciones ni sentimientos afines al hierro. El fuego se aviva también por la costumbre, el sentimiento artesano hacia el metal, que se desarrolló en toda Asturias en el siglo XIX para la elaboración de utensilios del hogar y aperos de trabajo, ha encontrado en Taramundi una continuidad adaptada a los tiempos y a las nuevas demandas del mercado.
El mimo con el que algunos lugareños se dedican ahora a esta actividad de las navajas les viene, pues, de lejos: fraguas, batanes, mecanismos y artilugios de toda condición asociados al agua de lluvia y al medio rural. El forjado siempre fue una derivación de las corrientes de agua, y como el agua de un río fluye hoy en día de forma constante en unos 14 talleres artesanos y en una pequeña industria en la misma capital del concejo. Hacia 1960 había en Taramundi unos 80 talleres artesanos. Hoy en día el visitante puede observar el trabajo de los ferreiros o fabricantes de cuchillos y navajas en Abraído, Aguillón, Bres, Cabaniñas, Esquíos, Llan, Loutima, Mousende, Nogueira, Río del Louro, Vega de Llan y Vilanova. En la Casa de Cultura de Taramundi también se puede contemplar una exposición permanente de cuchillos.
Las falsificaciones y el fraude de este producto artesano es común. Es fácil adquirir una presunta navaja de Taramundi, pero es menos fácil que sea realmente artesana. Así que lo mejor es acercarse a este muncipio y visitar in situ alguno de sus talleres. Así conoceremos una forma de vida y de paso las señas de autenticidad del producto. Después podremos comprar con pistas suficientes.