Centrándonos en la hoja, vemos que está realizada en acero carbono, y que la punta está cortada en diagonal, y con un pequeño radio también en la punta, así como su uñero para abrirla.
La virola, larga y redonda, como es natural en estas navajas, le dan una sencillez extrema, y una gran utilidad, ya que el acero al carbono de su hoja es excelente, y le confiere una gran calidad de corte.
La tengo desde hace más de 17 años, y aquí podéis ver la marca de este artesano.
Esta navaja pertenece a los artesanos de Taramundi, Antonio Díaz Alvarez y su hijo Antonio Díaz Bermúdez, en su taller de Vega de Llan a un kilómetro escaso de Taramundi.
Ambos se han especializado en la fabricación de navajas y tijeras, siendo los únicos que en esta comarca elaboran este producto, creada en madera de boj, ese árbol que esta gente ha sabido utilizar en su vida cotidiana, realizando objetos para la cocina, cucharas, tenedores, platos, así como bastones y diversas cosas más.
Actualmente su hijo Antonio Díaz Bermúdez regenta dicho taller y continúa con la profesión.